Cuándo realizar la primera visita al dentista

Para realizar la primera visita al dentista, pensamos que es necesario, como padres, que la dentadura del bebé esté completa, o incluso, no se realiza hasta que detectamos alguna anomalía o una caries.

La idea de llevar a un bebé al dentista no es algo que atraiga a muchos padres, ya que consideran que esta visita debería realizarse cuando el bebé ya tenga la dentadura de leche completa, alrededor de los 3 años de edad.

Pero según la SEOP (Sociedad Española de Odontopediatría), la primera visita del niño al dentista debe realizarse cuando aparezca el primer diente del bebé, más o menos a los 6 meses de edad.

Algunos profesionales recomiendan que edades más tempranas para hacer esta primera visita, para poder revisar que la formación de la boca se va realizando correctamente.

Pero, ¿no parece más lógico realizar la primera visita cuando ya tiene la dentadura de leche completa? Puede parecerlo, sí, pero con la gran cantidad de productos cargados de azúcar, junto con una higiene bucal, que en muchos casos es insuficiente, nos indica que las revisiones deben comenzar antes.

De hecho, se ha comprobado que el 26% de los menores de 4 años ya han desarrollado alguna caries en algunos de los 20 dientes que componen la dentadura de leche. Este aumento de las caries en los infantes ha obligado a los expertos a replantearse el momento de la primera visita al dentista.

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Cómo debe ser la primera visita al dentista

Tenemos la costumbre, tanto en niños como en adultos, en acudir a nuestro especialista en salud bucal solo cuando detectamos una posible caries, algún dolor o molestia, o cuando sufrimos alguna rotura o pérdida de alguna de las piezas.

Para mejorar nuestra salud bucal, este tipo de conducta debería ser modificada, tanto en adultos como en niños, por eso la educación de los niños para que acudan antes al dentista sería un paso fundamental.

Y es que nada mejor como la prevención para evitar males mayores en el futuro. De ahí que las revisiones sean fundamentales y sobre todo en los más pequeños.

Aunque haya gente a la que la visita al dentista le parezca uno de esos momentos que le encantaría evitar, creemos firmemente que la primera visita a nuestro especialista es fundamental para erradicar ese tipo de sentimientos que se producen en algunos adultos.

Para las primeras visitas de un bebé, serán de la forma más distendida posible, y mediante el juego, proceder a una primera exploración para concretar que el desarrollo se está realizando de forma correcta. Después esta primera toma de contacto, iremos realizando revisiones periódicas para verificar ese desarrollo.

Es aconsejable que durante el primer año de vida se realicen un par de visitas al odontopediatra, para que, además de revisar la boca del bebé, se informe a los padres sobre una serie de consejos de hábitos dietéticos y cuidados de la boca, en particular, en estas edades tan tempranas, sobre todo en lo que se refiere a los chupetes, biberones y otros objetos que los niños puedan llevarse a la boca.

Por eso se suele recomendar el uso de dedales o cepillos pediátricos para niños de tan corta edad, o en el caso de no tener aún los dientes, con una pequeña gasa, para limpiar las encías y la lengua. De este modo evitaremos que las posibles bacterias que haya en la boca, comiencen a generar ácidos que dañen a los futuros dientes.

Estas revisiones permitirán saber si por causa de hábitos como chupar los dedos, el chupete o el biberón se produzcan alteraciones en el desarrollo de los dientes o de la mandíbula (en estos últimos casos es menos probable, ya que están diseñados para evitarlo). De este modo evitaremos que en un futuro se detecten y el tratamiento tenga que ser más agresivo.

Si ya no es un bebé en la primera visita

Cuando los niños llegan siendo un poco más mayores, las pautas serán parecidas, ya que una de las prioridades será generar confianza en el equipo de especialistas, mediante juegos y actitudes positivas. La información no se le debe dar solo a los padres, los niños deben ser partícipes de esta información para que la vayan asimilando y les resulte más fácil generar hábitos saludables.

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De este modo se conseguirá también que el odontopediatra vaya creando un historial de la boca del niño, para tener mejor controlado su desarrollo y poder detectar algún de desvío en su desarrollo, como una mordida cruzada o una mala posición dental.

Los niños comenzarán a hacer uso del cepillo dental, adecuado a su edad, y por supuesto con una poco de pasta de dientes. Para su limpieza se recomienda el uso de un poco de pasta dentífrica, una pequeña cantidad, como un grano de arroz.

En el caso de que ya empiece a perder las piezas de leche, habrá que controlar su caída, ya que en ocasiones lo hace en edades tempranas, cuando el diente definitivo aún no está listo para salir, provocando que quede un hueco entre piezas dentales.

Si el nuevo diente no eclosiona con la suficiente “rapidez” podía provocar que ese hueco se cierre, al recolocarse los dientes para realizar un masticado correcto. Esto es muy común con los dientes de leche, ya que no tienen una raíz tan profunda como los definitivos, lo que aumenta su capacidad de “moverse” para reforzar esos huecos.

En el caso de que esto ocurra, se suele usar un retenedor, para mantener ese espacio interdental y facilitar la salida del nuevo diente. De este modo, guiaremos al diente nuevo a que se coloque en su posición y podremos evitar un mal alineamiento. Es una forma de prevenir una mala posición dental y que en un futuro tengamos que recurrir a aparatos correctores.

Por todo ello, la visita al dentista desde edades muy tempranas solo puede traer beneficios, para generar confianza en los profesionales que van a revisar su boca, para revisar su correcto desarrollo y para intentar inculcar una correcta higiene bucal.

Y para esto, la ayuda de los padres nos resulta fundamental, dando ejemplo y ayudando a hacer entender a los niños, lo importante que es mantener una boca sana.

Si aún no has realizado ninguna revisión con tu pequeño, en Clínica Dental Sorias contamos con un gran equipo de odontopediatras para ayudarte en todo lo referente a la salud de tu pequeño.

¿Le has hecho ya tu primera revisión? Cuéntanos tu experiencia