Uno de los tratamientos que más están de moda dentro de la estética dental es e, blanqueamiento dental, este se puede realizar de diferentes formas, empleando técnicas similares, pero con diferente tecnología.
¿Qué es un blanqueamiento dental?
Un blanqueamiento dental consiste en un tratamiento estético que busca limpiar los dientes y blanquear la dentadura, dándole una apariencia más perfecta.
La duración del tratamiento depende de la higiene bucodental que tengamos después del tratamiento, esto quiere decir que dependiendo de cómo nos cuidemos los dientes tras realizarnos el tratamiento afectará a la duración del mismo.
Hay diversos factores que oscurecen los dientes o hacen que cambie su coloración:
- Algunos hábitos de alimentación junto con una deficiente higiene bucal
- Fumar
- Evitar las visitas dentales de rutina y la limpieza dental profesional
- Algunos medicamentos que dejan una mancha o ciertas condiciones médicas que afectan al esmalte
- La edad también es uno de los factores que, al envejecer, hace que nuestros dientes se vuelvan pálidos, amarillentos o marrones
- Traumas severos, golpes o accidentes pueden afectar la apariencia de los dientes y hacerlos opacos
- La genética también juega un papel vital a la hora de dar color al esmalte
¿En qué consiste el blanqueamiento dental?
Existen diferentes técnicas de blanqueamiento dental a poner en práctica en función de lo que el esteticista dental considere:
Blanqueamiento con gel: En este sistema se moldean unas cubetas a partir de un molde de la boca, para que después el paciente pueda ponerlas encima de los dientes, llenas de gel, durante el tiempo que le haya aconsejado su dentista. Después se retira el gel. Este tratamiento se llevará a cabo en función de tono que se desee y de lo que aconseje el dentista.
Blanqueamiento de dientes con fotoactivación: Se aplica una capa de gel blanqueador encima de los dientes para después aplicar una luz laser o led. Tras unos 30 minutos se consigue un blanqueamiento de dientes. Pasados 15 días se puede realizar una segunda sesión. Es un tratamiento que no genera ningún tipo de molestia, y solo en algunos casos, puede generar sensibilidad dental que desaparece con el tiempo.
Blanqueamiento individual de dientes no vitales: Los dientes no vitales son los que han sufrido algún traumatismo y se les ha realizado una endodoncia. A este tipo de dientes se les realiza un blanqueamiento dental introduciendo el blanqueador por el canal del nervio.
¿Cuánto dura el blanqueamiento?
La duración del blanqueamiento dental depende de los hábitos del paciente y del cuidado que tenga de los dientes tras el tratamiento. Lo habitual es que el tratamiento dure varios años, esto se ve reducido en caso de que la persona consuma café habitualmente u otras bebidas que tiñen los dientes o que fume ya que este tipo de sustancias tiñen los dientes de un color oscuro y los dañan, lo que reduce la efectividad del blanqueamiento.
Para mantener durante más tiempo el blanqueamiento es recomendable tener una buena higiene bucodental, cepillándose los dientes tras cada comida principalmente, aunque hay una serie de recomendaciones para mantener los dientes mas tiempo blancos:
- Evitar la pasta dental blanqueadora y sustituirla por una con flúor. El flúor ayuda a mantener nuestro esmalte fuerte y sano.
- Evitar pastas dentales con clorhexidina. Algunas pastas dentales llevan este compuesto y tiñe los dientes. Además, debemos evitar las pastas dentífricas y los colutorios con color.
- Evitar las pastas para la sensibilidad dental. Estas pastas cierran los poros de los dientes y dificultan que el producto blanqueante penetre.
- No fumar. El tabaco disminuye la efectividad del blanqueamiento.
- Llevar una dienta blanda. Los expertos recomiendan realizar una dieta blanda durante los 7 días posteriores al tratamiento, evitando alimentos que pueden teñir los dientes.
- Evitar los alimentos y bebidas muy calientes o muy fríos. Tras un blanqueamiento dental es común sufrir cierta sensibilidad dental. Lo recomendable es evitar los alimentos muy fríos o muy calientes durante los 5 días posteriores al tratamiento.
Cabe destacar que el blanqueamiento dental solo puede realizarse en pacientes con los dientes sanos, evitando las personas que tengan una caries, infección, fisura o algún problema similar en los dientes. Además, debe realizarse con los dientes limpios sin placa bacteriana, por ello recomendamos solicitar una cita para una limpieza dental antes de realizar el blanqueamiento. También hay que destacar que el blanqueamiento dental baja 1 o 2 tonos como máximo al color original de nuestros dientes y, por último, que este tratamiento no es definitivo, por mucho que cuidemos nuestros dientes, con el paso del tiempo estos perderán tono de nuevo y habrá que volver a realizarse el tratamiento si queremos recuperar el tono.