El cepillo de dientes: Historia y tipos

El cepillo de dientes es un instrumento que nos ayuda en la limpieza diaria de nuestra boca. Suele ser de forma recta con cabeza en forma de cepillo con cerdas perpendiculares.

Para una correcta limpieza bucal debemos de cepillarnos los dientes al menos dos veces al día como mínimo, con un cepillo de dientes adecuado a nuestra boca, una pasta dentífrica y combinándolo con enjuague bucal e hilo dental.

HISTORIA DEL CEPILLO DE DIENTES

La importancia de la higiene bucal tiene sus indicios ya en la prehistoria, aunque las evidencias sitúan la confección del primer cepillo de dientes en 1498, creado por un emperador chino. Éste colocó cerdas de pelo de un cerdo salvaje en un mango de hueso.

En el siglo XVII, el cepillo dental primitivo viajo hasta Europa de mano de los viajeros y navegantes, al principio siendo un artículo usado exclusivamente por la élite.

A lo largo de la historia el cepillo de dientes sufrió varias modificaciones debido principalmente a la dureza que presentaban las primeras cerdas,  a su facilidad para deteriorarse y a su rápida contaminación por microorganismos.

En 1960 se inventó el primer cepillo eléctrico de manos de Squibb Comany, una empresa americana. Éste, obviamente, también ha presentado modificaciones y es por ello que actualmente existe una gran variedad de tipos y marcas.

Hoy en día son muchos los tipos de cepillos dentales que hay en el mercado y marcas que los comercializan. Por lo tanto, tengamos la boca que tengamos, seguro que en el mercado hay un cepillo de dientes perfecto para nosotros.

TIPOS DE CEPILLOS DENTALES

Los cepillos de dientes varían en tamaño, forma y textura, así como en longitud, dureza y disposición de las cerdas y por último, manuales o eléctricos.

Según la dureza de las cerdas pueden ser de tres tipos:

• Duro: las cerdas de este tipo de cepillo son las más rígidas. Se recomienda para aquellos que poseen una gran salud bucodental y no tienen problemas de sensibilidad en dientes ni encías. No es recomendable aun así utilizarlos con mucha fuerza, ya que puedes dañar las partes blandas o el esmalte.
• Medio: este tipo es el más utilizado. Es recomendado para aquellas personas que tengan una buena salud dental pero su boca no sea lo suficientemente resistente como para aguantar los cepillos duros.
• Suave: es el cepillo con las cerdas más débiles. Éste es recomendable sobre todo para las personas que tengan dientes y/o encías muy sensibles o para quienes sufran de gingivitis u otras enfermedades bucales.

Según su forma, los cepillos pueden ser:

• Cepillos convencionales: éstos son los cepillos dentales más comunes y los más comercializados. Suelen tener de 3 a 4 tiras de cerdas y, tal y como hemos dicho antes, estas cerdas pueden ser duras, medias o suaves.

• Cepillos eléctricos: son los cepillos de dientes que funcionan con un pequeño motor, que hace girar las cerdas y así evita que nosotros realicemos el movimiento. Suelen tener tres tipos de movimientos: movimiento alternado, movimiento vertical arqueado o movimiento vibratorio. Tienen una base recargable y puede funcionar a pilas o con batería. Estos cepillos pueden ser especialmente útiles para personas con discapacidad física o mental, debido a la simplicidad de su uso.

• Cepillos infantiles: son los cepillos dentales especialmente diseñados para que los más pequeños empiecen sus hábitos de limpieza dental. Estos cepillos tienen la cabeza más pequeña, las fibras más suaves y el mango más alargado. Normalmente estos cepillos van acompañados de atractivos diseños.

• Cepillos interproximales: Son cepillos diseñados especialmente para limpiar entre dientes, sobre todo cuando el espacio entre las piezas es amplio, cuando existen puentes o implantes. Existe una gran variedad de este tipo de cepillos, ya que debemos escoger el que mejor se adapte a la separación de nuestros dientes. Son muy usados cuando hay ortodoncia fija, facilitando limpiar cualquier rinconcito. Por último hay que recordar que este tipo de cepillo dental no es un sustituto del cepillo normal, sino que es un complemento como puede ser el hilo dental.

• Cepillos periodontales: también llamado sulcular o cervicular. Tiene dos tiras de cerdas, y suele usarse en casos de inflamación gingival o surcos periodontales profundos, para eliminar la placa bacteria presente debajo de la encía. Estos cepillos dentales también facilitan la higiene oral a aquellas personas que están en tratamiento de ortodoncia.

• Cepillos de ortodoncia: éste es un cepillo muy eficaz diseñado para los pacientes que llevan ortodoncia fija. Posee una hilera central con cerdas más cortas haciendo que así se adapte mejor, evitando que se estropee más el cepillo y consiguiendo una mejor limpieza dental.

En definitiva, podéis comprobar que tengas el tipo de boca que tengas, va a haber un cepillo de dientes adaptado a tus necesidades. Y aun cuando estés en tratamiento, ya sea por ortodoncia fija o por algún tipo de enfermedad bucal, tendrás un cepillo de dientes especialmente diseñado para que la limpieza de tu boca sea siempre segura, indolora y eficaz. Desde Clínica Sorias te recomendaremos siempre el cepillo de dientes que necesite tu boca, puesto que somos expertos en cuanto a higiene bucal.